Finaliza la Semana de la Caridad
Con la celebración del Corpus Christi en Castellón y Segorbe
Con la celebración de la Fiesta del Corpus Christi con sendas Santas Misas y Procesiones, el sábado en Castellón, y este domingo en Segorbe, ha finalizado la Semana de la Caridad.
La Concatedral de Santa María, en Castellón, acogió el sábado la celebración de la fiesta del Corpus Christi con la Santa Misa que estuvo presidida por Monseñor Casimiro López Llorente y concelebrada por el Deán de la Concatedral y párroco de Santa María, D. Miguel Simón; y por el Vicario de Pastoral, D. Miguel Abril, así como por el conjunto de párrocos de la ciudad que se sumaron a esta celebración conjunta y acompañaron a los catequistas y niños de Primera Comunión de sus respectivas parroquias. También lo hicieron las autoridades políticas, policiales y militares de la ciudad, con la alcaldesa Dª. Begoña Carrasco a la cabeza.
Homilía
La liturgia de la Palabra dio paso a la homilía del Obispo que dirigió, principalmente, a las niñas y niños de Primera Comunión que, junto a sus catequistas, padres y familiares, tuvieron un papel destacado en la celebración. Monseñor Casimiro López Llorente hizo una catequesis sobre la Eucaristía poniendo el broche final a la formación que han recibido como paso previo. Así explicó cómo tras la lectura de la Palabra alza el Evangelio en señal de «bendición al Pueblo de Dios que recibe la Palabra de Dios aquí y ahora».
Recordó que lo más importante de la celebración de la Eucaristía es rememorar la última cena de Jesús con sus apóstoles en la que «toma el pan, lo bendice, lo parte y dice tomad y comed esto es mi Cuerpo; tomad y bebed esta es mi sangre». Con esta bendición, continuó D. Casimiro, «instituyó la Eucaristía y pidió que así lo hicieran siempre en memoria suya».
«Día de la Caridad»
El amor que recibimos al participar de la Eucaristía es un amor para compartir «con aquellos que no tienen, con los pobres de pan, de cultura de Dios, con los destruidos, con las personas viven en soledad, que están enfermas, que necesitan nuestro acompañamiento».
Se refirió así a la celebración del «Día de la Caridad» y al mandamiento del amor: «amaos los unos a los otros como yo os he amado». Y así es como se nos da el mismo Jesús en la cruz, afirmó, «hasta el final, derramando hasta la última gota de su sangre para darnos la vida”.
Procesión
Y así fue pues los fieles de la ciudad se rindieron a la grandiosidad del Señor que bendijo a su paso a cuántos le alababan con cánticos, oraciones y postrándose ante Él.
Miembros de las principales Cofradías, así como asociaciones y movimientos se sumaron a la procesión solemne que culminó de nuevo en la Concatedral con la bendición final.
Entre ellos, una representación de Cáritas Diocesana de Segorbe-Castellón que estrenó su guion.
El domingo la celebración del Corpus Christi se trasladó a la concatedral de Segorbe donde Monseñor Casimiro López Llorente presidió la Santa Misa y, posteriormente, se realizó la Procesión por las calles de la capital del Alto Palancia.
Fuente: Obispado de Segorbe-Castellón