Gesto 7 de octubre

En Cáritas Diocesana nos comprometemos con #Iglesiaporeltrabajodecente y nos sumamos a esta Jornada Mundial con un gesto simbólico y comprometido: nos pringamos las manos por el trabajo decente que es un derecho y no un privilegio!!

Porque nos pringamos las manos -literal y simbólicamente-. El trabajo decente no es un privilegio, sino un derecho que sigue sin cumplirse para muchas personas. Muchas veces las condiciones laborales que sufrimos están marcadas por la precariedad, la inestabilidad, la explotación o la invisibilización. Con este gesto queremos decir que no nos quedamos al margen, que ponemos el cuerpo, que nos comprometemos. Queremos una sociedad en la que el trabajo dignifique, no desgaste. Una vida en la que haya tgiempo para cuidarnos, para descansar, para soñar y para vivir con dignidad.

La mano que hemos dejado marcada significa:

-nuestras ganas de construir

-nuestra denuncia ante la injusticia

-nuestra fuerza colectiva para transformar

#TrabajoDecenteDerechoNoPrivilegio